jueves, 21 de diciembre de 2017

Los talleres en el aula de Matemáticas. Un aprendizaje real y funcional.

Son muchos los docentes que, aún hoy día, enseñan matemáticas a partir de lo instado en un libro de texto, siendo esta la única y exclusiva herramienta, el epicentro de las metodologías, tanto que sin él somos incapaces de llevar una clase. Se podría decir que, es el libro el que utiliza al docente como transmisor del conocimiento, y no el profesor el que utiliza el libro para tomar ventaja de ello. SOMOS ESCLAVOS DE UNA MISMA HERRAMIENTA: EL LIBRO DE TEXTO.

En este post, no queremos hacer una crítica al libro de texto, pues este es un recurso más como cualquier otro, y es hasta este punto en el cual queremos que el profesorado abra los ojos y su mente a otras alternativas para la enseñanza de las matemáticas, y de cualquier asignatura en general. Seamos conscientes de que nuestro alumnado, el estudiante de la era tecnológica, tiene a su disposición infinidad de recursos con los que conseguir un aprendizaje funcional, que les sirva para su día a día e interiorice sus aprendizajes. Básicamente, buscamos, utilizando los términos de la psicología evolutiva de Ausubel y Vigotsky, que el alumnado adquiera un aprendizaje significativo y duradero.

Enseñar matemáticas implica mucho más que explicar un temario teórico y realizar una gran cantidad de ejercicios o actividades inútiles basadas en la repetición y en la mecanización, donde se calcule de igual manera los gramos (g), los litros (L) y los metros (m)... Únicamente, se busca que una de estas medidas sea la excusa para hacer sumas, restas, multiplicaciones y divisiones (lo cual es un grave error), y en ningún momento el alumnado llega a medir y a saber cuánto equivale un metro en un espacio determinado, o qué cantidad de agua equivale un litro, y como estos, miles de ejemplos. Se enseña que para pasar de metros a decímetros hay que multiplicar por 10, y para pasar de metros de decámetros hay que dividir entre 10, pero ¿por qué?. Son este tipo de preguntas las que se hace el alumnado constantemente cuando aprende matemáticas. 
  • De metros a decímetros hay que MULTIPLICAR POR 10. ¿?¿?¿?
  • De metros a decámetros hay que DIVIDIR POR 10. ¿?¿?¿?
  • ¿Por qué una habitación se mide en Metros Cuadrados? ¿Y un volumen por qué se mide en Litros y Metros Cúbicos?
  • Seguro que todos nosotros nos hemos hecho este tipo de preguntas.
Debemos ofrecerles respuestas a sus preguntas y la mejor manera de conseguirlo es mediante experimentaciones y prácticas observables.


Es por estas razones dadas, por la que surge la necesidad de utilizar los TALLERES DIDÁCTICOS para la enseñanza de las matemáticas, para que el niño aprenda a estimar medidas (determinar su medida sin ayuda de instrumentos), y para ello el aprendiz debe tener referentes. Igual que un albañil es capaz de medir la longitud de una habitación solo contando cuántas baldosas hay, como cuando una persona es capaz de saber que su coche entra en un determinado hueco de aparcamiento, como cuando un carnicero sabe el peso aproximado de carne que tiene solo cogiéndolo... A esto es a los que nos venimos refiriendo a aprendizaje funcional, que sirva para situaciones cotidianas, no a la mera realización de actividades de cálculo (también necesarios obviamente).

Para que el alumnado tenga referentes para estimar medidas, es necesario que en la escuela aprenda a medir y a pesar. Un ejemplo podría ser medir las dimensiones de la clase en grupos, las dimensiones del patio, la amplitud de la abertura de la puerta... lo que se nos ocurra, pero no tengamos miedo a que el alumnado manipule, porque esta es la forma de interiorizar. Asimismo, podrían comenzar utilizando materiales cotidianos para medir, tal como la mesa mide 6 lápices, la pizarra mide 5 peluches Minion, el tablón de anuncios mide 20 cromos de LaLiga..., lo que nos permitirá explicarles que para medir las cosas hacen falta unas unidades de medida que sean universales y las mismas para todos, de manera que nos sea más fácil visualizar dicha medida.

Hay gran infinidad de MATERIALES DIDÁCTICOS para ser usados en los talleres de medida:
  • Regletas de Cuisenaire para medir longitudes y áreas, cintas métrica, vasos y jarras de precipitado, matraces, pesos y balanzas, reglas convencionales, transportadores de ángulos...
Un ejemplo de taller sería el siguiente:
El alumnado precisará de una hoja de datos u hoja de registro de datos previamente preparado por el tutor, donde deberá ir anotando las medidas o muestras que vaya realizando.

viernes, 15 de diciembre de 2017

Asambleas en el salón de clase: aprendiendo a comunicar, aprendiendo a escuchar.

Durante el transcurso de este post, haremos una breve explicación sobre las asambleas como recurso didáctico y explicaremos algunas de sus temáticas, en las cuales hemos tenido la oportunidad de  participar y observar aspectos positivos, que se deben de tener en cuenta.



En primer lugar, debemos definir qué es una asamblea educativa. Podemos referirnos a ellas como un espacio donde docente y discente comparten y dialogan sobre diferentes opiniones, ideas y experiencias de forma democrática. Las asambleas nos dejan abordar muchos y diversos temas de interés para nuestro alumnado, y a su vez ellos pueden participar y aportar siempre su granito de arena. Desde nuestro punto de vista, es una gran herramienta aplicable en cualquier aula, puesto que el alumnado de seguro tendrá un actitud positiva frente a una dinámica de este estilo. Todo lo explicado está basado en lo que Iglesias et al afirma, (2012):
La asamblea es un acto cooperativo, participativo en el que se toman decisiones sobre cualquier tema de la vida escolar [...] Basada en el diálogo, implica importantes aprendizajes para la vida [...] La asamblea es un espacio donde aprenden autonomía, donde madurar con el resto del grupo, desarrollar la empatía y el pensamiento crítico a medida que sus miembros negocian, hacen propuestas constructivas de trabajo o de organización, llegan a acuerdos y asumen responsabilidades. Nos permite descubrir y aprovechar las potencialidades individuales y del grupo [...] Mediante la asamblea se trabajan las competencias básicas y habilidades sociales (p. 71-72)
Tras esta definición del concepto de "asamblea educativa", debemos señalar lo que necesitamos para poder realizarlas:
  •  Un pequeño espacio de la clase, donde quepan todos nuestros alumnos sentados en círculo.
  •  Varias ideas sobre las temáticas a organizar. 
  •  Uso del material pertinente. (Proyecciones, tarjetas plastificadas, objetos, libros, fotos y un largo etcétera de materiales en función de la planificación del docente)
  •  Ganas y predisposición por parte del docente.
Una vez mencionado esto, debemos comenzar a organizar nuestras asambleas, para ello ha de respetar una franja de tiempo en nuestro apretado horario, para así poder hacerlas, por ejemplo, la primera media hora al llegar a clase. También, hay que tener en cuenta los temas a tratar cada uno de los días, para que así los educandos asocien la asamblea con una temática particular, cosa que les ayudará a tener una predisposición a la asamblea dependiendo del día de la semana. Ejemplo: el lunes lo dedicaremos a hablar del último libro que haya leído alguno de los estudiantes.
A continuación, nos gustaría mencionar algunos ejemplos de temas o tópicos a tratar en cada una de las asambleas:
  • Arte por el mundo. Ya sean monumentos, cuadros, edificios importantes, etc.
  • Habilidades del alumnado, que las muestren a sus compañeras. Algún deporte, magia, artesanía.
  • Lecturas que hayan realizado nuestros alumnos (ya pueden ser artículos de periódicos, revistas, libros...).
  • Creación de palabras, tal y cómo nos mostró César Bona en su primer libro. Los discentes darán nuevos significados a palabras "extrañas" de nuestro léxico, por ejemplo, denigrante: "Emigrante que viene de la ciudad de Denia"
  • Debates sobre temas de interés para el alumnado y de actualidad.
  • Inteligencia emocional, es otro aspecto que puede ser trabajado en las asambleas con nuestros discentes.

Mucha de la información expuesta y las fotos mostradas se recabó durante nuestro periodo de prácticas en el C.E.I.P El Tejar.


BIBLIOGRAFÍA

  • IGLESIAS, B., DE LA MADRID, L., RAMOS, A., ROBLES, C. & SERRANO, A. (2012). Metodologías innovadoras e inclusivas en educación secundaria: los grupos interactivos y la asamblea de aula. Revista Tendencias Pedagógicas, 21, 63-78. Recuperado el 26 de octubre de 2015 de, http://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=4182890

jueves, 30 de noviembre de 2017

El kamishibai en el desarrollo de las destrezas comunicativas

Es sabido por todos que, el currículo de Primaria en el marco legislativo español actual (Ley Orgánica 8/2013, de 9 de diciembre, para la Mejora de la Calidad Educativa, LOMCE 8/2013) exige el desarrollo de las destrezas comunicativas en el área de Lengua Castellana y Literatura, siendo muchos los recursos existentes que se alejan del convencional y tedioso libro de texto. En esta entrada se explicará una de las herramientas más simples, pero funcionales, en lo que se refiere al desarrollo de las habilidades comunicativas (hablar, leer, escuchar y escribir) que se denomina Kamishibai.

Como marco teórico, destacar que el Kamishibai (o teatro de papel) es un recurso educativo bastante interesante e innovador, cuyos orígenes se remarcan a la década de los 30, cuando Japón se encontraba en una profunda depresión. Esto provocó el estallido de este recurso, puesto que eran muchas las personas que trataban de ganarse la vida narrando cuentos a través de este. Posteriormente, en 1938, Kenia Matsuaga empezó a valorizarla a nivel didáctico, siendo la gran impulsora de dicho recurso en los colegios (Aldama, 2005).

El Kamishibai no es más que un marco con puertas, en las que se introduce unas láminas con dibujos del cuento en cuestión, y en cuyo reverso de las láminas viene la historia, siendo similar al cuentacuentos pero con la ayuda de imágenes para una mejor comprensión y dinamismo. El kamishibaya (cuentacuentos) únicamente debe leer y darle la entonación adecuada. Su utilización es simple, pero su utilización en las aulas depende de la predisposición y el interés del docente, siendo su aplicabilidad absolutamente amplia y extensa.


Gracias a este instrumento, el alumnado puede llegar a mejorar la lectura en voz alta, la narración y el habla en público, la atención, la escucha activa y la imaginación. Asimismo, si les pedimos a nuestro alumnado la creación de sus propios cuentos van a trabajar la escritura, escribiendo con propiedad textos narrativos tratando de expresarse adecuadamente, con el objetivo de que sus compañeros puedan seguir el cuento cuando sea narrado. De esta forma, conseguiremos alejarnos de las reglas gramaticales y ortográficas que se estudian en los centros educativos sin ningún contexto y sin significatividad alguna, y elevando la escritura al nivel que le corresponde, eliminando prejuicios y connotaciones negativas sobre esta. 

Lo importante en la escuela es que el discente adquiera la capacidad de leer de manera comprensiva y competente, y desarrollar la expresión escrita en todas sus vertientes, partiendo de la imaginación de los niños y niñas, y será esta la mejor forma para que aprendan las reglas ortográficas.

Lo más interesante es que, tal como pudimos comprobar gracias al C.E.I.P. El Tejar de Fuengirola, puede ir dirigido a cualquier nivel de escolaridad, desde Infantil (con actividades de escucha y debate sobre los cuentos) hasta los cursos altos de Primaria (como la realización de un proyecto basado en la preparación de cuentos para su posterior narración a  discentes de cursos más bajos), por lo que siempre se adaptará el tipo de actividades.


Recalcar que, no se centra exclusivamente en la animación a la lectura y como medio de disfrute para el alumnado más infantil, sino que, además, abarca muchas posibilidades educativas tales como:
  • Aplicar algunas de las actividades del libro de Gianni Rodari "Gramática de la Fantasía".
  • El aprendizaje de una LE (Lengua Extranjera), mediante la lectura y escucha de cuentos en una segunda lengua (L2).
  • Desarrollo de habilidades artísticas en la realización de las láminas para nuestras creaciones.
  • Trabajar el miedo a hablar en público con el alumnado con cualquier tipo de trastorno específicos del lenguaje (dislexia, disfasia, disfonía, retraso en el habla, mutismo selectivo...), pues la expresión oral es fundamental y poco trabajada en las aulas.
  • Como introducción a distintas UDIs (Unidades Didácticas Integradas) para generar motivación en los educandos (cuentos relacionados con los contenidos que se vayan a trabajar).
  • Trabajar la literatura infantil de una manera más lúdica.
Una cita interesante de lo anteriormente citado, es la que hace Cid (2009):
Asimismo, está bien documentado que en diferentes puntos del planeta y en diferentes idiomas se ha empleado [el Kamishibai] para enseñar a los más pequeños materias comunes, tales como las figuras geométricas, las primeras operaciones aritméticas, los colores o los hábitos de higiene y comportamiento (p. 145).
Aquí os dejamos un par de sesiones que pudimos llevar a cabo en el C.E.I.P. El Tejar de Fuengirola, que tuvo bastante éxito entre el alumnado: 

¿A qué sabe la luna?

jueves, 16 de noviembre de 2017

El paradigma del trabajo por proyectos en la escuela

Hagamos un ejercicio de rememoración y pensemos a qué tipo de metodología se asemejaban las clases que impartían nuestros profesores de EGB o Primaria. Seguramente, estaban basadas en el libro de texto, en la repetición, en la realización de actividades sin contextualización, en la realización de fichas y en la memorización de unos determinados contenidos (a veces sumamente extensos e inútiles) para plasmarlos tal cual en los temidos y tediosos exámenes. Afortunadamente, este paradigma tradicional está cambiando y son numerosos los docentes que aplican nuevas metodologías y se adaptan a las nuevas demandas de la sociedad actual. Podría decirse, parafraseando a Teresa Sánchez Compaña (profesora de la UMA) que son muchos los docentes que de manera invisible están "extendiendo su mancha de aceite" para que la educación se encuentre al nivel que le corresponde, por su importancia en la creación de nuevas generaciones, siendo la precursora del resto de profesiones.

Una vez dicho esto y centrándonos en lo realmente importante de la entrada, una de las metodologías en auge son los denominados trabajos por proyectos. ¿En qué consisten? Básicamente, consisten en la creación de situaciones reales dentro del ámbito educativo, en el cual los alumnos/as aprenden desde las experiencias de aprendizaje todas las áreas de conocimiento, la resolución de problemas que puedan surgir, la cooperación entre compañeros…, promoviendo un aprendizaje significativo, la participación de estos, etc. Dichos proyectos pueden surgir de la misma curiosidad de los discentes o de la participación guiada que hace el maestro/a con estos, y por ende, puede despertar su motivación.

Los proyectos son la mejor forma de trabajar los contenidos en todas las áreas, puesto que engloba todos ellos en un mismo contexto, situación y experiencia de aprendizaje. Realmente, cabe destacar, que los contenidos no están separados, sino que los separamos nosotros para "mejorar" y "clasificar" los aprendizajes; es decir, no es posible enseñar matemáticas sin utilizar la lengua, así como tampoco es posible enseñar ciencias sin utilizar gráficas y estadísticas. Por tanto, todo contenido es interdisciplinar.

Basándonos en Sanmartí, Burgoa & Nuño (2011) "El objetivo no es ser capaz de reproducir unos determinados saberes, sino de utilizar los saberes científicos para comprender, analizar, valorar y actuar en situaciones muy diversas, distintas de las trabajadas en el aula, e imprevisibles”.

Tal como afirma Tobón (2006):

  • El trabajo por proyectos dentro del currículo consiste en la construcción con los estudiantes de un problema, el diseño de estrategias de resolución, su ejecución y valoración, buscando el trabajo en equipo y la participación de otras personas, teniendo como base la formación y/o consolidación de un determinado conjunto de competencias[…]. La metodología de proyectos tiene gran valor en la educación, ya que en ella se integran aspectos fundamentales en la formación del individuo. 
He aquí un proyecto realizado por Javier Herrero y yo, sobre las Olimpiadas de Brasil de 2016, en la cual extrapolamos varios contenidos del currículo a través de este núcleo o tópico central, con el cual buscamos contextualizar y motivar al alumnado:


jueves, 9 de noviembre de 2017

Innovar. 20 Aplicaciones que todo docente debe conocer. Parte II


Como ya se ha comentado en la entrada anterior, innovar es un concepto bastante amplio que implica aplicar nuevas tendencias y metodologías en nuestras aulas. Toda idea innovadora debe ser bienvenida, pues en la nueva sociedad del conocimiento y la información las pedagogías tradicionales quedan obsoletas y hay que dar paso a enseñanzas relacionadas con la vida real, con conocimientos que sean extrapolables al día a día de toda persona. Es por eso, que vemos conveniente trabajar la Competencia Digital del alumnado, la cual es una de las Competencias Clave (CC.CC.) que nos encontramos en nuestras leyes educativas, y que nos ayudará a conseguir el resto de CC.CC (Real Decreto 126/2014, de 28 de febrero, por el que se establece el Currículo Básico de Primaria).

Aparte de innovar en el medio de transmisión del conocimiento, también se trata de cambiar la metodología que hay alrededor de nuestras actividades y proyectos, para que los resultados sean mucho más fructíferos.

Todo docente debe tener una mente abierta a las nuevas posibilidades que genera la sociedad del conocimiento y las nuevas tecnologías, y escuchar lo que otros pedagogos y maestros les pueden aportar, sin obcecarse en realizar sus metodologías de siempre. Salir de la zona de confort y estar en continuo aprendizaje forma parte del trabajo de cada uno de los profesionales de la enseñanza.

Uno de los problemas más comunes para no aplicar los recursos que nos aportan los diversos dispositivos electrónicos, es el miedo y desconocimiento de que el alumnado sea capaz de utilizarlos correctamente. He de decir, que tal como vulgarmente se dice, los infantes de hoy en día nacen con un aparato bajo el brazo, y son capaces de utilizarlos, muchos de ellos, mejor que nosotros. De este modo, trabajamos la Competencia Digital mucho mejor que con un libro de texto. Aunque parezca algo ilógico y poco ortodoxo, todavía existen centros que enseñan las NNTT a través de libros de texto, ¿un poco contradictorio, no?

Finalmente, antes de dar paso a nuestro listado de recursos, comentar que los dispositivos de los centros están para utilizarse, pues es mejor que se rompan de mucho utilizarlos que tenerlos muertos de risa en una sala para sacar una foto y "pregonar a los cuatro vientos" que son un centro TIC. Sacar provecho de ellos es fundamental.

Dicho todo esto, os dejamos con el listado de 20 recursos, que pueden seros de gran ayuda y utilidad a la hora de innovar y realizar dinámicas de clase más lúdicas:

1 Class Dojo: es una plataforma digital bastante popular entre el profesora, pues ayuda a gestionar la conducta del alumnado. En esta aplicación podemos establecer los parámetros de comportamiento y capacidades que se deseen alcanzar, tales como: el trabajo en equipo, la actitud individual, la participación en clase, la perseverancia, etc., permitiendo, incluso, ofrecer retroalimentación al discente y elaborar reportes para las familias.
Resultado de imagen de class dojo

jueves, 2 de noviembre de 2017

Innovar, una concepción errónea del término. Herramientas para ello. Parte I.


Hoy en día, vivimos en una sociedad que está en continuo cambio, lo cual provoca que la escuela introduzca nuevos métodos de enseñanza. Estos cambios sociales están favoreciendo la transformación de la sociedad a través de la denominada globalización. Esta se puede definir como un proceso de integración mundial en diferentes ámbitos (económico, social, cultural y tecnológico), el cual hace que el mundo sea cada vez un lugar más interconectado y multicultural. Basándome textualmente en Miguel Argibay (2003) es un "concepto sociológico o de antropología cultural, el cual constata la existencia de diferentes culturas en un mismo espacio gráfico y social’’. 

Teniendo en cuenta lo anteriomente citado, el plano educativo debe ser abordado desde otra perspectiva, ya que en este nuevo marco contextual, el acceso al conocimiento se puede realizar de dos formas:

  • Mediante el aprendizaje de lenguas extranjeras, estas nos ayudará a comunicarnos con más personas, compartir ideas, opiniones y, a su vez, estar expuestos a las ideas y opiniones de otros. En otras palabras, nos ayudará a tener una mente más abierta a los cambios.
  • El uso de las TIC, en la sociedad actual, el uso de las TIC es imprescindible a la hora de acceder al conocimiento.
    En este caso, el uso de las TIC es realmente atractivo dentro del ámbito de la escuela, según su uso didáctico. Es en este punto donde el docente tiene un gran dilema, como nos dicen Gallego, Alonso y Cacheiro (2011) un docente se pregunta: “¿Qué efectos y retos suponen los medios y recursos en la tarea del educador? Y ¿Qué medios y recursos tecnológicos se pueden utilizar y seleccionar para el proceso educativo?”
Estas preguntas que planteamos son de gran importancia a la hora de introducir diferentes aspectos tecnológicos en nuestras aulas, ya que debemos tratar de intuir qué elementos pueden ser beneficiosos para nuestro alumnado. Para ello, un análisis de las necesidades, motivaciones e intereses de los discentes será imprescindible.

Llegados a este punto, encontramos el término de innovación, ¿Qué es? ¿Es beneficial? ¿Cuándo conviene realmente introducir alguna innovación en el aula?

Antes de todo me gustaría aclarar la definición del concepto de innovación. Para Cañal y otros (2002):
La innovación no es una actividad puntual sino un proceso, un largo viaje o trayecto que se detiene a contemplar la vida en las aulas, la organización de centros, la dinámica de la comunidad educativa y la cultura profesional del profesorado. Su propósito, como decíamos, es alterar la realidad vigente, modificando concepciones y actitudes, alterando métodos e intervenciones y mejorando o transformando, según los casos, los procesos de enseñanza y aprendizaje. (p.11 y 12)

Esto quiere decir, que innovar no significa utilizar los ordenadores, hacer algún que otro debate, utilizar las presentaciones que nos permiten hacer muchísimos programas. La palabra innovar también incluye fomentar que nuestros alumnos y nosotros pensemos críticamente, modificar el ambiente donde se crea el aprendizaje por uno bastante mejor, fomentar el trabajo cooperativo, grupal e individual y mejorar las relaciones entre alumnos y docente-discente, favoreciendo la comunicación, incluso, desde la comodidad de nuestros hogares.

Muchas veces, pensamos que por utilizar una presentación y mostrarle así el conocimiento a nuestro alumnado estamos siendo realmente innovadores.


Imagen [1]

En esta imagen se ve el claro ejemplo, el docente está realizando una suma “interactiva” usando el proyector, pero realmente lo único que cambia es el canal por donde se está transmitiendo el conocimiento. Viendo esto, cualquiera podría pensar que la innovación no sirve para nada, ya que es lo mismo de siempre, pero de otra forma. Como ya mencionamos anteriormente, innovar no solo consiste en usar el ordenador, los proyectos o actividades que envuelvan al uso del ordenador; también tienen que ser motivadoras, creativas o innovadoras para el alumnado. No es lo mismo que los discentes vean la suma en la pizarra y la copien en el cuaderno, a que el docente haga la explicación de esta suma, ya sea usando las regletas o cualquier material o recurso, con el fin de que cada grupo de alumnos haga un tutorial explicando los pasos para realizar la cuenta matemática. Por lo que se puede afirmar que una innovación conlleva a la modificación de los canales de transmisión del conocimiento, pero a su vez a una modificación del fin al que llegar con los proyectos pertinentes.

Una vez aclarado el concepto de innovar y lo que realmente aborda, habría que tener en cuenta los beneficios y posibilidades que puede brindarnos a nuestras aulas y al sistema educativo en general.


  • En primer lugar, potencia el aprendizaje, utilizando las TICs, diferentes apps, plataformas, programas, siempre rodeando estos recursos con unos proyectos que también innoven y motiven a nuestros educandos, que puedan sacar hasta la última gota de estos recursos y materiales innovadores.
  • A continuación, no podemos olvidarnos que nos ayudarán a impartir nuevos conocimientos y competencias, como puede ser la Competencia Digital (una de las 7 competencias clave según nuestra LOMCE). En resumen, no solo se trabaja la Competencia Digital, importante en nuestra nueva sociedad del conocimiento, sino que también contribuye a la consecución de todas y cada una de las Competencias Clave que nuestras leyes educativas nos exigen.
  • Finalmente, como ya hemos explicado, en la sociedad actual el uso de las TICs es obligado para el acceso de la información, y la facilidad y exactitud que nos puede dar para alcanzar la información requerida.
También he de añadir, que dar el paso para innovar puede ser difícil en algunos casos, puesto que nos adentramos en algo que “desconocemos”, salimos de nuestra zona de confort y nos enfrentamos al miedo de hacer cosas diferentes, pero de eso se trata. La sociedad cambia y con ellos los diferentes métodos, ya sean asociados a la economía, política o en nuestro caso la educación, y es por eso que debemos adentrarnos en este nuevo mundo que aparece frente a nosotros e innovar en la medida de lo posible, siempre que alcance los beneficios y metas que hayamos planteado.

 Como dijo Del Río, J.L. (2015):

"Innovar no consiste en enseñar de la misma manera que nos enseñaron a nosotros, pues de esa forma lo único que se consigue es tener un año de experiencia y 35 años repitiendo lo ya realizado" Muchos docentes son reacios al cambio porque no permiten que docentes más jóvenes les recomienden nuevas metodologías.'' 
Tras esta reflexión, sobre nuestra nueva sociedad y la innovación, me gustaría presentaros una aplicación que puede ser de gran utilidad en nuestras aulas:

Todos conocemos Kahoot, esa gran aplicación que puede hacer que la motivación de nuestros alumnos crezca hasta niveles insospechados. Puede ser utilizada para hacer debates, encuestas, simulaciones de programas televisivos, o incluso puede ser una alternativa a los exámenes. Pero esta aplicación tiene una desventaja, hacen falta varios dispositivos, smartphones u ordenadores, lo cual es muy difícil encontrar en aulas de Primaria o Secundaria. Para ello encontramos Plickers, que es, digámoslo de esta manera, prima hermana de Kahoot, ya que tiene las mismas funciones, pero solo hace falta un dispositivo, el del profesor.

Imagen [2]

Con todo y con esto, Plickers nos permite realizar evaluaciones en el aula, usando preguntas, ya sean de opción múltiple o de falso y verdadero y obtener datos den vivo para ayudarnos a conocer si nuestros discentes están adquiriendo los conocimientos de la manera correcta.

El docente, en la web de Plickers, puede crear las diferentes clases que tenga, con el nombre y apellido de cada uno de los alumnos, es decir, nos da facilidades para organizar y guardar los resultados de cada actividad que realicemos con la aplicación. Todos estos datos, pueden ser consultados, por lo que tras hacer varios “Plickers”, tendremos la opción de evaluar a cada discente viendo los resultados en unos llamativos diagramas de barras. También tenemos la opción de ver cada una de las respuestas que hizo un determinado alumno.

A la hora de crear la batería de preguntas, el profesor tiene la opción de crear diferentes carpetas y clasificarlas en temática, dificultad o muchas más variantes.

Finalmente, cuando vayamos a  hacer uso de esta herramienta, usaremos el panel “live view” para ver en tiempo real las respuestas de nuestros alumnos, las cuales las realizarán haciendo uso de las tarjetas que la misma página web de Plickers nos proporciona. Estas respuestas serán escaneadas con la camára del smartphone del docente e irán directamente a nuestro panel de “live view”, donde todos los discentes podrán ver los resultados.
Imagen [3]

Para culminar esto, os dejo el vídeo de cómo funciona esta herramienta.


Finalmente, respecto a la entrada que hizo mi compañero Antonio J. Lorca Martín, me gustaría hacer mención a una aplicación llamada Kids Calculator, la cual puede ayudarnos a la hora de hacer uso de las regletas de Cuisenaire de forma virtual, por lo cual el alumnado puede incluso sin tener el material, hacer uso de estas gracias a esta gran aplicación.


REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS:

- ALONSO, M.L., CACHEIRO, C.M. & GALLEGO, D.J.(2011). Educación, Sociedad y Tecnología. Educatio Siglo XXI, 30(1) pp 336-337.
- CAÑAL DE LEÓN, P. y otros (2002). La innovación educativa. Madrid.
- GARCÍA, J. & REDONDO, R. (2010). De profesor tradicional a profesor innovador. Revista digital para profesionales de la enseñanza (1) pp 1-7. Recuperado de, https://www.feandalucia.ccoo.es/andalucia/docu/p5sd7620.pdf
- DEL RÍO, J.L. (2015). Seminiario UMA para TFG. Grado en Maestro de Educación Primaria.
- IMAGEN [1]: DEIRA NOYA (2014). Recuperado el 2 de noviembre de 2017 de,
http://stellae.usc.es/red/mod/file/thumbnail.php?file_guid=122601&size=large
- IMAGEN [2]: PBWORKS (2017). Recuperado el 2 de noviembre de 2017 de, https://bcpsodl.pbworks.com/f/1477337269/plickers.png
- IMAGEN [3]: DELGADO VON EITZEN, C. (2017). Recuperado el 2 de noviembre de 2017 de, http://www.christiandve.com/wp-content/uploads/2017/07/plickers.jpg


martes, 24 de octubre de 2017

El odio a las matemáticas tiene su génesis en los algoritmos tradicionales

¿Cuántos de nosotros hemos experimentado esa sensación de rabia e impotencia ante todo lo relacionado con las matemáticas? Desafortunadamente, esto tiene lugar a edades tempranas, en los primeros cursos de la Educación Primaria, y más concretamente, en los algoritmos tradicionales de las operaciones elementales de cálculo, que son un sin sentido, desde mi punto de vista y el de otros muchos docentes.

Esto se debe, en primer lugar, a que no se comprenden los números, es decir, se trabaja con cifras/dígitos en lugar de números completos. En los algoritmos tradicionales, la cifra 3 en las decenas, equivale a lo mismo que la cifra 3 en las unidades, lo cual provoca un retraso en la adquisición de la competencia matemática en su totalidad, puesto que se debe hacer saber que la cifra 3 en las decenas, equivale a 30, y por tanto, se parte del error de no trabajar con la equivalencia correcta del número.

  C D U     C D U
  1  2  4  + 2  3  8 = (4+8)+(20+30)+(100+200)= 350+12= 350+10+2= 362

Por lo tanto, se ha de operar con la equivalencia del número, y no con la cifra/símbolo que se emplea, pues no todos los números han de tratarse como unidades. De esta forma será más fácil comprender por qué nos llevamos una, diez o cien, según el caso, y aprenderán progresivamente el sistema de numeración decimal. Trabajar con las regletas de Cuisenaire, tal como lo hace Antonio R. Martín, profesor del CEIP Aguere de Santa Cruz de Tenerife, es una manera óptima para aprenderse el sistema de numeración decimal y a operar utilizando números completos mentalmente, sin necesidad de utilizar la fea costumbre de utilizar los dedos para sumar dígitos. (Véase página oficial de YouTube, Antonio Martín 2020). Una vez aprendan a trabajar con números completos todo el proceso de aprendizaje de las matemáticas es mucho más sencillo, por lo que no hay que desesperarse si el proceso es más lento.


En segundo lugar, otro de los errores más comunes en la enseñanza-aprendizaje de las matemáticas, es que no se enseñan dentro de un contexto y se tiende a operar números sin extrapolarlos a algún aspecto de la vida, como por ejemplo, niños del colegio, dinero, el valor de un pokemón dentro de un cromo,... He ahí, la importancia de aplicar los cálculos a un contexto significativo y cercano a los problemas cotidianos de los educandos, tal como expresa el método ABN (Abierto Basado en Números).


El método ABN creado por Jaime Martínez Montero es un método alternativo para la resolución de cálculos matemáticos y cuyos beneficios empiezan a ser contrastables por aquellos docentes que los emplean dentro de sus metodologías, pues es un método más natural que implica el procesamiento de la información y la reflexión (Martínez y Sánchez, 2012):

CARTAS Y MENSAJES DE ÁNIMOS A LAS PERSONAS  EN LOS HOSPITALES  QUE ESTÁN COMBATIENDO EL DICHOSO VIRUS  He aquí algunas de las cartas qu...